Redacción

GUASAVE, Sinaloa._ Uno de los elementos jóvenes que están en el campo de entrenamiento de Algodoneros de Guasave, es el receptor Sebastián Lizárraga, quien viene a su tercer temporada con el club,  y tiene los objetivos claros para poder ayudar al equipo.

“Primeramente me siento muy contento porque Algodoneros me contempló para estar de nuevo en la pretemporada, y estamos trabajando para tener un mejor equipo”, dijo el receptor.

Lizárraga, quien es nacido en Mazatlán, pero avecindado en Ciudad Obregón, inició su proceso como pelotero profesional en el 2015, al ser firmado por la organización de Marlins de Miami, con la cual hizo una carrera en Ligas Menores, la cual complementó con Orioles de Baltimore, sin embargo, en el 2019 fue dejado en libertad, tras el azote de la pandemia a nivel mundial.

Lo anterior, hasta cierto punto le fue benéfico, ya que tuvo la oportunidad de jugar en la Liga Mexicana de Beisbol con Tigres de Quintana Roo, lo cual le dio la visión de conocer más a los lanzadores mexicanos.

Jugó en 33 duelos, en los que bateó .289 con un cuadrangular y nueve carreras remolcadas.

Antes, en la campaña 2017-2018, estuvo brevemente con Venados de Mazatlán en la Liga ARCO, en la que regresó en el certamen 2019-2020 con Algodoneros de Guasave, club con el que sigue en este momento.

Lo antes explicado, le ha dado la experiencia como para estar en una posición de buscar una oportunidad que lo lleve a jugar con más regularidad.

En relación al trabajo que se está haciendo en esta pretemporada, está enfocado en alcanzar los objetivos que se tienen en mente.

“Estamos trabajando con el objetivo de llegar a los playoffs, y esta vez se está preparando aún mejor porque tenemos en mente el campeonato, y es por eso que estamos laborando exhaustivamente”, expresó.

“Es una armonía muy bonita, ya que somos otra familia, en la que no hay envidias ni nada; todos nos llevamos muy bien, hay una sana convivencia que nos lleva a estar muy unidos”, señaló.

Acerca de los objetivos personales que tiene, Lizárraga fue precavido al señalar que prefiere no hablar de ello, a manera, quizás, de superstición.

“Todos tenemos objetivos y planes, tanto personales como grupales, pero me gustaría mencionarlo porque pudiera ser de mala suerte (sonríe), mejor me enfoco en alcanzarla”, mencionó.